Al Cesar lo que es del Cesar
Mucha gente me pregunta por Rebeca y cómo esta aquí y qué hace para entretenerse. Me complace decir que esta bien, bastante bien diría yo! Ella no puede trabajar en Estados Unidos, nadie puede sin un contrato de trabajo conseguido desde su país de residencia, pero eso ya lo sabíamos, como también teníamos claro que estar aquí le brindaba una oportunidad única para estudiar inglés.
En febrero, ya instalados en nuestro nuevo apartamento mi Rebe comenzó las clases en el ELS de Seattle, una academia que tiene escuelas en todo el Estados Unidos. Se trata de un curso intensivo de 20 horas semanales en el que meten bastante caña, de hecho se levanta a la misma hora que yo de diario para preparse antes de las clases y se pasa la tarde con los deberes que le mandan y estudiando vocabulario. Una de las cosas buenas de esta academia es que hacen bastantes actividades extraescolares para que los alumnos se relacionen, hecho que en concreto a Rebeca, al no haber casi hispanoparlantes, le viene genial por que no le queda más remedio que esforzarse con el idioma. Yo creo que es uno de los acicates que le han hecho mejorar muchísimo en tan sólo dos meses. Para mi no fué hasta que tuve la oportunidad de relacionarme con gente de todo el mundo en mi viaje de mochilero por tailandia que no aprecié de verdad el valor de tener una lengua en común con la que comunicarnos, y a Rebeca le está pasando ahora lo mismo. No hay mayor motivación para estudiar inglés os lo aseguro.
Bueno, pues igual que cuando me reconocieron el duro trabajo a mi en Boeing os conté los regalitos que me habían hecho (los cuales, debo decir, tengo totalmente desaprovechados: ni he utilizado las entradas que me dieron de cine, ni he cambiado el voucher por el casco de football americano de Boeing, entre otras cosas por que no lo han vuelto a traer... con lo útil que es tener un casco de football en casa por favor...) ahora toca hablar del reconocimiento que le han hecho a mi niña Rebeca en su academia, y es que tal y como reza el título, "al Cesar lo que es del Cesar".
En febrero, ya instalados en nuestro nuevo apartamento mi Rebe comenzó las clases en el ELS de Seattle, una academia que tiene escuelas en todo el Estados Unidos. Se trata de un curso intensivo de 20 horas semanales en el que meten bastante caña, de hecho se levanta a la misma hora que yo de diario para preparse antes de las clases y se pasa la tarde con los deberes que le mandan y estudiando vocabulario. Una de las cosas buenas de esta academia es que hacen bastantes actividades extraescolares para que los alumnos se relacionen, hecho que en concreto a Rebeca, al no haber casi hispanoparlantes, le viene genial por que no le queda más remedio que esforzarse con el idioma. Yo creo que es uno de los acicates que le han hecho mejorar muchísimo en tan sólo dos meses. Para mi no fué hasta que tuve la oportunidad de relacionarme con gente de todo el mundo en mi viaje de mochilero por tailandia que no aprecié de verdad el valor de tener una lengua en común con la que comunicarnos, y a Rebeca le está pasando ahora lo mismo. No hay mayor motivación para estudiar inglés os lo aseguro.
Bueno, pues igual que cuando me reconocieron el duro trabajo a mi en Boeing os conté los regalitos que me habían hecho (los cuales, debo decir, tengo totalmente desaprovechados: ni he utilizado las entradas que me dieron de cine, ni he cambiado el voucher por el casco de football americano de Boeing, entre otras cosas por que no lo han vuelto a traer... con lo útil que es tener un casco de football en casa por favor...) ahora toca hablar del reconocimiento que le han hecho a mi niña Rebeca en su academia, y es que tal y como reza el título, "al Cesar lo que es del Cesar".
Este es el diploma que le han dado a Rebeca en su escuela de inglés por ser uno de las dos mejores alumnos de su ciclo formativo de este mes, esto es, una de los dos mejores de los tres cursos que componen el ciclo medio que está actualmente cursando. El diploma se acompaña de una tarjeta de invitación para el starbucks.
Desde aqui mi enhorabuena y mi reconocimiento público por el trabajo bien hecho. Estoy muy orgulloso de ti mi niña!!!